¿De qué trata el Nuevo Testamento?

El Nuevo Testamento trata sobre la figura y el mensaje de Jesús. Este mensaje es para todos y de plena actualidad, ya que constituye una forma de vida y de actuar ante la sociedad.

La Buena Noticia

El tema principal es la Buena Noticia del Reino de Dios. Jesús se ha hecho hombre por nosotros y nos ha salvado para que vivamos en plenitud y después de nuestra muerte resucitemos igual que él para estar con Dios.

Al principio ya existía la Palabra y la Palabra se dirigía a Dios, y la Palabra era Dios. La Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros. Y nosotros contemplamos su gloria, gloria como de Hijo único del Padre, lleno de lealtad y fidelidad. 

Evangelio de Juan 1, 1;14

Ved qué amor tan grande nos ha mostrado el Padre: que nos llamamos hijos de Dios y lo somos. Por eso el mundo no nos reconoce, porque no lo reconoce a él. Queridos, ya somos hijos de Dios, pero todavía no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando aparezca, seremos semejantes a él y lo veremos como él es.

Primera carta de Juan 3, 1-2

Esta buena noticia no es sólo en exclusiva para algunos, sino que es universal y para todos. Para Dios todas las personas son importantes y están llamadas a vivir un encuentro personal con él. Y ese encuentro debe producir frutos que beneficien a las personas con las que nos compartimos la vida: familiares, amigos o quienes nos vayamos encontrando.

Es un mensaje que cura y alivia. Dios a través de Jesús y del Espíritu, nos acompaña y conforta en las dificultades y problemas del día a día. Es esperanza de que no estamos solos y que con su ayuda nos podemos levantar después de nuestros errores y caídas.

Por eso os digo que no andéis angustiados por la comida [y la bebida] para conservar la vida o por el vestido para cubrir el cuerpo. ¿No vale más la vida que el alimento?, ¿el cuerpo más que el vestido? Fijaos en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni recogen en graneros, y sin embargo, vuestro Padre del cielo las alimenta. ¿No valéis vosotros más que ellas?
Vuestro Padre del cielo sabe que tenéis necesidad de todo esto. Buscad, ante todo el reinado de Dios y su justicia, y lo demás os lo darán por añadidura. Así pues, no os preocupéis del mañana, que el mañana se ocupará de sí. A cada día le basta su problema.

Mateo 6, 25-26;32-34

Dios Padre a nuestro encuentro

El Nuevo Testamento trata de que Dios Padre es siempre el que nos elige y se hace el encontradizo. Para encontrarle hace falta que tengamos abiertos no solo los ojos para fijarnos en lo que sucede alrededor sino también el corazón para acoger este mensaje.

El mensaje principal es que las personas siempre tienen que estar en el centro de todo lo que hagamos. A Dios, lo externo, lo superficial y lo vacío no le interesa. No se puede decir que amas a Dios si no te detienes y acompañas al que sufre.

Queridos, amémonos unos a otros, pues el amor viene de Dios; todo el que ama es hijo de Dios y conoce a Dios. Quien no ama no ha conocido a Dios, ya que Dios es amor.

Primera carta de Juan 4, 7-8

No hay excusas para no hacer nada, ya que todos podemos aportar y hacer algo por los demás. Estamos llamados a ser la luz de Cristo en el mundo y para eso hay que moverse y dar gloria a Dios con nuestra vida y con nuestras obras.

La multitud al oírlo estaba asombrada de su enseñanza. Al enterarse los fariseos de que había tapado la boca a los saduceos, se reunieron alrededor de él; y uno de ellos, [doctor en la ley] le preguntó maliciosamente: —Maestro, ¿cuál es el precepto más importante en la ley? Le respondió: —Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, y con toda tu mente. Éste es el precepto más importante; pero el segundo es equivalente: Amarás al prójimo como a ti mismo.

Evangelio de Mateo 22, 33-40

A continuación, puedes profundizar en este tema o regresar a la introducción.

Jesús y las mujeres <<< Volver a la introducción