Renovación de las promesas del Bautismo

Proponemos una actividad consistente en realizar una renovación de las promesas del bautismo. Puede realizarse de forma independiente o junto a otra celebración.

La celebración del bautismo católico suele realizarse siendo niños pequeños. En ese caso, los padres y padrinos realizan una serie de promesas en nombre del bautizado. Si el bautismo se recibe más mayor, es el propio bautizado quien realiza las promesas.

En ambos casos, al ser el bautismo un sacramento que se realiza una sola vez. Esas promesas realizadas son lo suficientemente importantes como para ser recordadas y renovadas.

En la liturgia de la Vigilia Pascual, la renovación de las promesas del Bautismo ocupa un lugar importante.

Esta actividad está propuesta para jóvenes en un contexto de apstoral juvenil, puede ser empleada también para adultos o en la catequesis de confirmación.

Preparación

Un lugar apropiado para la celebración de la renovación será en torno a la pila bautismal, si las condiciones de espacio lo permiten. De lo contrario, tras la procesión de entrada, se colocan visiblemente todos y cada uno de los elementos que se utilizan en el sacramento del bautismo.

Si el grupo es pequeño, el inicio de la celebración consistirá en nombrarlos e indicar el uso y significado que tienen en el rito bautismal.

Monición de entrada para la renovación de las promesas del bautismo

Hoy nos hemos reunido aquí para recordar y renovar lo que nuestros padres prometieron por nosotros en el día de nuestro Bautismo.

            Aquí se nombrarían los participantes.

            El Bautismo nos incorporó a la Iglesia y nos hizo partícipes de la misión sacerdotal, profética y real de Cristo. Es el primer sacramento, la vía de acceso para conseguir la vida eterna y entrar en el Reino de Dios.

            El Bautismo exige la respuesta humana de la conversión; además, supone un nacimiento de lo alto, un milagro de Dios, el don del Espíritu.

Canto: VEN ESPÍRITU DE DIOS.

            Entra el celebrante entre dos jóvenes que llevarán los signos del agua y de la luz         

Saludo del celebrante:

            ¡Bienvenidos en nombre de la IGLESIA!. Estos signos del Bautismo que os presentamos hacen presente entre nosotros a Jesús que vive para siempre. Su paz sea con vosotros.

Todos : ¡Y con tu espíritu!.

Lectura de la palabra

En la preparación, se elige una entre las que recoge el Ritual del Bautismo.

A continuación se hace un breve comentario a la palabra.

Gesto

Se entrega, a cada participante, una tarjeta, en la que esté escrito, por una parte, el “Credo” y, por la otra, la frase: “Soy un bautizado, ¿qué hago con mi bautismo?”.

Renovación promesas bautismales

Celebrante:  Bautizado, recuerda que el día de tu bautismo renunciaron en tu nombre a Satanás, es decir, al pecado, como negación de Dios; al mal, como signo del pecado en el mundo; al error, como ofuscación de la verdad; a la violencia, como contraria a la caridad; al egoísmo, como falta de testimonio del amor. ¿Qué has hecho de este compromiso?

Pausa

Celebrante: ¿Estas dispuesto a perseverar en esa renuncia?

Todos : Sí, estoy dispuesto.

Celebrante: Bautizado, recuerda que el día de tu bautismo renunciaron en tu nombre a las obras del maligno, como son: envidias y odios; perezas e indiferencias; cobardías y complejos; tristezas y desconfianzas; injusticias y favoritismos; materialismos y sensualidades; faltas de fe, esperanza y caridad. ¿Qué has hecho de estos compromisos?

Pausa

Celebrante: ¿Estas dispuesto a perseverar en esa renuncia?

Todos : Sí, estoy dispuesto.

Celebrante: Bautizado, recuerda que el día de tu bautismo renunciaron en tu nombre, a las seducciones del maligno, como son: creerte el mejor; hacerte superior; estar muy seguro de ti mismo; creer que ya estás convertido del todo; quedarte en las cosas, medios, instituciones, métodos, reglamentos y no ir a Dios. ¿Qué has hecho de estos compromisos?

Pausa

Celebrante: ¿Estas dispuesto a perseverar en esa renuncia?

Todos : Sí, estoy dispuesto.Celebrante: Bautizado, recuerda que el día de tu bautismo manifestaron en tu nombre la fe en Dios, Padre todopoderoso, y en su Hijo

Jesucristo, nacido de María Virgen, muerto, resucitado y sentado a la derecha de Dios, y en el Espíritu Santo. ¿Qué has hecho de esta confesión de fe?

Pausa

Celebrante: ¿Te reafirmas en esa fe?

Todos : Sí, me reafirmo.

Celebrante: Confesemos hoy como ayer nuestra fe.

Todos: (Se recita una fórmula de fe; el “Credo” por ejemplo, u otra).

Celebrante Confirma la fe de tus hijos, Señor.

Todos: Aumenta, Señor, nuestra fe (Tres veces)

Señor que nos quieres santos y nos lavaste en las aguas santas del bautismo, se propicio con nosotros y danos sabiduría para adentrarnos en el misterio de muerte y vida que encierran las aguas bautismales. Amén.

Aspersión

(El que preside la celebración toma agua y asperje a la asamblea)

Mientras se pueden cantar “Surgirá un mundo nuevo” o “Mi Dios está vivo”

Otro gesto que puede ser utilizado en lugar de la aspersión

Mientras se canta “Ilumíname, Señor”, cada uno pasa a expresar su fe introduciendo el pequeño cirio, que habrá encendido del Cirio Pascual para las promesa, lo introduce en el agua y hace la señal de la cruz.

Ilumíname, Señor, con tu Espíritu.

Transfórmame, Señor, con tu Espíritu.

Ilumíname, Señor, con tu Espíritu.

Ilumíname y, transfórmame, Señor.

Y DÉJAME SENTIR,

EL FUEGO DE TU AMOR,

AQUÍ, EN MI CORAZÓN, SEÑOR (2 veces)

Resucítame, Señor, con tu Espíritu.

Conviérteme, Señor, con tu Espíritu.

Resucítame, Señor, con tu Espíritu.

Resucítame y conviérteme, Señor.

Fortaléceme, Señor, con tu Espíritu.

Consuélame, Señor, con tu Espíritu.

Fortaléceme, Señor, con tu Espíritu.

Fortaléceme y consuélame, Señor.

Celebrante:       “Id pues, a anunciar a todos los hombres la alegría de ser discípulos de Jesús, sin olvidar que se nos reconoce cristianos”.

Final de la celebración

Todos unidos rezan o cantan el Padre Nuestro, tras el cual, el celebrante dice la oración final :

Padre estamos contentos de ser tus hijos. Por ello te damos gracias por medio de Jesús, tu Hijo, que vive y reina por los siglos. AMEN.

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